quarta-feira, outubro 06, 2010

Medallistas atribuyen a la buena alimentación su larga vida deportiva

Madrid, 6 oct (EFE).- Los medallistas olímpicos Isabel Fernández y Rafael Trujillo han atribuido hoy a los buenos hábitos alimentarios su larga trayectoria deportiva, la ausencia de lesiones y, en gran parte, los buenos resultados obtenidos durante su carrera.

Fernández, oro en Sydney 2000 y bronce en Atlanta'96 en judo, y Trujillo, plata en Atenas 2004 en vela, explicaron hoy durante los 'Desayunos Saludables' que organiza el Comité Olímpico Español (COE) cómo han aprendido a cuidar su alimentación y optimizar su rendimiento en dos deportes en los que el peso tiene una importancia fundamental.

"En mi etapa júnior no daba ningún valor a la alimentación y me limitaba a dejar de comer o beber en la semana de competición para dar el peso el día del torneo", comentó Fernández. "Luego entendí que si estás obsesionado con el peso, no puedes estar pendiente de los aspectos técnicos de la competición", apuntó la judoca, que pretende clasificarse para los Juegos de Londres 2012, en los que competiría con 40 años.

"Casualmente, fue en esa etapa júnior en la que tuve mis principales lesiones y en la que obtuve peores resultados", destacó.

Fernández, que se retiró tras los Juegos de Pekín 2008 y tuvo una hija hace diez meses, ha vuelto este pasado agosto a la competición -tras perder sin esfuerzo los 18 kilos que había engordado durante el embarazo- y ya ha ganado dos medallas de bronce en Copa del Mundo, lo que le ha hecho marcarse como objetivo acudir a Londres, los que serían sus quintos Juegos.

"El cuerpo tiene memoria. Después de dar a luz, sin los entrenamientos me faltaba algo tanto física como psíquicamente", indicó Fernández, que reveló que el membrillo es uno de sus alimentos preferidos para acumular energía y evitar bajones de azúcar.

Rafa Trujillo, oro en Sydney 2000 y bronce en Atlanta'96 y que padeció la única lesión grave de su carrera, en la espalda, por culpa del sobrepeso, tuvo que adelgazar 22 kilos para competir en los Juegos de Pekín porque la falta de viento en la bahía de Qingdao así lo exigía.

"La preparación de los Juegos de 2008 supuso un cambio fundamental en mi vida deportiva. Para perder 22 kilos no bastaban la dieta y el sobreentrenamiento: tenía que aprender a comer", contó.

Comer algo cada dos horas y media, adelantar las cenas o evitar los malos desayunos en países de costumbres alimentarias distintas a a las españolas son algunos de los trucos que utiliza Trujillo para mantener la báscula a raya.
 
FONTE: El Correo Digital (Vizcaya)

http://www.elcorreo.com/
FOTO: hoymujer.com

Nenhum comentário:

Postar um comentário